Parado frente a este comité y sabiendo que mis peticiones no serán escuchadas, me atrevo a hacer una declaración que toca la fibra más sensible de mis compromisos ideológicos, creo que todas mis eternas cavilaciones, compañeros, están resumidas en la pequeña reflexión que me preparo a brindarles. Tiene también que ver con los impulsos a lo largo de mi carrera investigativa que nunca han llegado a concretarse, por el simple motivo de que yo, tanto como ustedes, y como quizás todos los hombres de hoy en día, sea un cobarde.
La petición es simple, pude sonar profética o apocalíptica, pero no lo es, es solo que al abandonarlos me siento parado frente a un abismo que me llena de urgencia. Quisiera, que desde hoy volcaran su mirada a los niños, no para enseñarles sino que para aprender de ellos. Quisiera saber observando a los niños: quién es el mago, quién es el artista, quién es el político. Siento que ellos podrían demostrárnoslo tanto mejor. Miren a un grupo de niños jugando y reconozcan qué roles cumplen, ahí está la humanidad señores, lo que aquí practicamos es la perversión, no hacemos más que cumplir expectativas de otros mientas la vida se nos pasa estancados en la burocracia, un niño no pierde un minuto y si parece que pierde, es porque se está conectando con cosas auténticas. Así señores abandonen sus escritorios y vayan a jugar con sus hijos a ver si de una vez por todas generamos algo, entre tantas buenas intenciones que el tiempo ahoga. Eso haré yo, caballeros, los abandono.
Después de que cerró la puerta nadie se atrevía a mirarse las caras, algunos cuantos hubieran querido buscar complicidad en otras miradas pero prefirieron ahorrarse la vergüenza que pasarían en caso de no hallar la empatía. Por otro lado, Él, el que logró ser auténtico, se irá… buscará en su interior al niño que perdió y encontrará qué rol cumplir en este mundo, un rol más puro, sin pretensiones superficiales… tal vez lo logre, quién sabe. El punto es que la historia se trata de él y no del montón de huevones que se quedaron mirando.
29 abr 2010
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